sábado, 19 de enero de 2019

Comiendo en el norte de Burgos (Oña): Restaurante Blanco y Negro

Hola cosicas!!

Hoy os traigo lo que cenamos un día en nuestra escapada al norte de Burgos, en el restaurante Blanco y Negro, en el pueblo de Oña (Burgos).
(foto cogida de su Facebook)
Se encuentra en el centro del pueblo y tiene una peculiaridad: mezcla de cocina española y senegalesa.
Es algo que nos llamó mucho la atención. Cuando llegamos al mediodía a hospedarnos en el pueblo, ya vimos el cartel de completo a la hora de la comida y quisimos probar en la cena. Tuvimos suerte y había sitio.

La decoración es sencilla y con toques de Senegal pero sin recargarlo. Un ambiente íntimo en un local pequeño y con pocas mesas, para hacerlo más familiar.

Es una carta con platos y productos típicos de la zona y platos típicos de la cocina de Senegal.

Esto es lo que nos pedimos para dos personas:

QUESO DE OVEJA, LA MAJADA DE BARCINA (queso de oveja de leche cruda ecológico con sus mermeladas).
Habíamos visto en varios sitios que vendían quesos y quisimos probarlo.
A mi ya me enamoran con mermeladas con sabor intenso y estas eran así.

MONTADITO BLANCO Y NEGRO (Berenjenas, manzana y queso de cabra plancheado con bloc de foie gras, cebolla caramelizada y crema de naranja natural).
Como se ve en la foto las rodajas de berenjena eran bastantes gruesas pero no estaban nada duras, bien tiernas y la combinación de sabores, increíble de rico.

THIEBOU DJEEN (Corvina, yuca, zanahoria y repollo sobre arroz jazmín cocido en su fumet de pescado. Plato nacional de Senegal).
Con mucho sabor. El arroz muy suelto y las verduras con sabor intenso y tiernas.

Lo que se ve en la cuchara aparte es un aderezo picante que nos ofreció la camarera. Nos preguntó si nos gustaba el picante (a mi chico le encanta) y nos trajo ese poco, avisando que no cogiéramos cantidad, solo mojar la punta del tenedor y siempre acompañarlo con comida, no él solo. Nos lo recomendó porque le daba un toque a la comida, sobre todo al plato de corvina.
Yo ni lo intenté pero mi chico reconoció que era un picante muy intenso pero de sabor muy rico. Le sorprendió y gustó mucho. 

DIBI (Chuletas de paletilla de cordero maceradas con jengibre y ajo a la parrilla con patatas fritas).

Nos quedamos muy saciados pero queríamos probar los postres, así que pedimos para compartir:

TARTA DE QUESO (con compota de frutos rojos, crujiente de galleta y semillas de sésamo negro..
Muy rica y suave, la compota con mucho sabor.

De la que estábamos comiendo, vimos que traían algo curioso a algunas mesas y supusimos que era con las infusiones, así que nos pedimos unas y, después de elegir en la carta de infusiones, nos lo trajeron todo.

Ya las teteras me encantaron pero... es la primera vez que veo esto: relojes de arena! Dependiendo de qué tipo de infusión hayas pedido, tendrás que esperar el tiempo de uno de los relojes de arena. Para tomarla en su punto ideal, sin que llegue a amargar o no esté lista. Me pareció super curioso!!

Y hasta aquí nuestra rica cena.
Quedamos encantados, tanto por el sabor y calidad de los platos, como por la amabilidad de la camarera que nos atendió. Un sitio muy recomendable y diferente en la zona.

Os dejo los datos del restaurante:
Facebook: Restaurante-Blanco-y-Negro
Teléfono: 947.30.01.52
Dirección: C/ del Agua, 27. Oña (Burgos)
Hasta aquí el post de hoy.
Os dejo también enlaces de la escapada de fin de semana por Burgos.
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Gracias por leerme.

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