Ya por el camino, va cambiando el paisaje al que estamos acostumbrados, viviendo en la montaña. Cambiamos al extenso páramo y los campos de distintas tonalidades.
Y llegamos a nuestro destino: el Lago de Sanabria.
Íbamos con la intención de subirnos al barco que realiza un paseo por él.
El trayecto dura sobre una hora y media y cuesta 16 €. Al principio te sorprende el precio, pero está más que justificado. No es un simple paseo, ya que es un catamarán dedicado a la investigación. Los guías son biólogos e investigadores que utilizan esta embarcación para realizar una amplia investigación en el lago y su entorno, por lo que parte del importe del ticket, va destinado a su proyecto.
La travesía se centra en explicarnos su trabajo y en detallar la importancia del lago, de la flora y fauna que habita en él y su historia. La verdad que es muy recomendable y termina con uno de los guías sumergiéndose en el agua con una cámara para poder ver el fondo como si fuéramos uno de ellos. Es impresionante!
La entrada se puede comprar en una caseta que hay en el parking, aunque en fin de semana o en época estival, es recomendable reservar por internet o teléfono, ya que el barco tiene una capacidad y sólo realizan dos viajes al día.
En el parking también hay una zona muy bonita, de árboles con mesas, ideal si decides llevar comida.
Pero nosotros decidimos ir a comer a un restaurante que queda muy cerca, del que habíamos visto buenas reseñas por internet.
Desde el comedor tienes vistas al lago y es muy acogedor.
Pedimos el menú degustación, ya que tenía muy buena pinta y no nos defraudó.
Pulpo a la Sanabresa (pulpo con pimentón y ajo), tosta de bacalao, habas Sanabresas y caldo de berza. De segundo elegimos:
Solomillo con mermelada de frutos rojos
Trucha (muy típica en esta zona)
Todo por 15 €/persona, estuvo muy bien.
Después hicimos un poco de tour por la zona, subiendo al pueblo de San Martín de Castañeda, que nos sorprendió por la cantidad de restaurantes que había. Suponemos que en verano será una zona que tenga mucha afluencia. Aquí nos detuvimos a ver el monasterio y la iglesia que tiene en un lado.
Y seguimos nuestro camino hacia la Laguna de los Peces, desde donde se inician diversas rutas de senderismo.
Bajando puedes pararte en uno de los tantos miradores, a admirar el lago,
Después del paseo nos decidimos por bajar al pueblo de Puebla de Sanabria, que queda muy cerca.
Nos encantó por sus calles y el encanto de las casas.
Alguna casa destaca entre las demás por su cuidada decoración.
Veis algo sobre el banco blanco? qué será?
Unos lindos gatitos durmiendo plácidamente!
Y con esto finalizo nuestro día por la zona de Sanabria. Nos gustó mucho y nos quedamos con la sensación de que nos quedan miles de rincones por descubrir, así que habrá que volver ;)
Gracias por leerme y espero que os haya gustado.
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